La zanahoria, los huevos y el café

En cierta ocasión la hija que solía lamentarse en frente de la madre, de todos sus problemas y pesadumbres a las cuales la madre solo atenta escuchaba una y otra vez.
Hasta que un día la madre decidió que las lamentaciones de su hija tenían que ser superadas por ella misma.

Pues bien dice la madre a la hija, mira esta zanahoria, estos huevos y este café.  Los voy a hervir en agua durante unos veinte minutos, observa que pasa. Los pone en la mesa y pregunta a su hija, ¿Qué ves?.  La hija sorprendida responde, que la zanahoria esta blanda e inapetente, los huevos están duros y el cafe desprendió su aroma y nos dice que esta listo para beber.

Tenemos siempre una manera como reaccionar a nuestros problemas a nosotros de escoger, que prefieres:

Ser como la zanahoria que antes de ebullición, aparenta ser solida, sana y robusta, pero luego del efecto del calor, se muestra blanda, sin resistencia y poco apetitosa.

Ser como los huevos en una coraza frágil y delicada que luego del efecto del calor y la adversidad, una vez que se rompe, pasan a ser duros.

Ser como los granos de café, que por efecto del calor y la presión, se diluyen, coloran el agua y homogéneamente propagan su aroma y sabor.

En mi caso yo he optado ser como los granos de cafe. Ser café  colombiano, morenito y maduro, adaptarme a lo que me toque y siempre deleitar con mi aroma.

Amigo o amiga, tú que escoges?

Un abrazo a todos y de la vida escojamos lo mejor a nosotros de reaccionar de acuerdo a lo que nos corresponde, de nosotros depende ya que problemas y tristezas tenemos todos, es como reaccionamos frente a ellos lo que hace la diferencia.

Feliz fin de semana les desea,