Los Muiscas eran enemigos de todo lo malo. Siempre habían respetado los consejos del gran Bochica. "Yo les ayudaré mientras sean laboriosos y honestos", les prometió antes de írse y así fue. La lluvia nunca falto, semillas crecieron, el Sol calento, las cosechas eran copiosas. Mazorcas y papas siempre hubo en el altar. La gente vivía en paz parecía que la maldad había desaparecido, mas no era cierto, sólo se habia escondido, dentro de las almas oscuras en las grietas de las montañas; le tenía miedo a la luz del día, al Sol que Bochica había puesto en el cielo. Una noche los espíritus de la envidia, de la discordia, de la furia y de la infidelidad resolvieron reunirse. En ese entonces como eran hipócritas no se atrevían a mostrar la cara en el día, y se preguntaban: Cómo es que los hombres no se pelean, porque andan tan contentos y trabajan todo el día, le agradecen a Dios y respetan a sus mayores y a sus mujeres?. Esto no puede continuar! Agreg...
Mi querida amiga,el alma tiene ilusiones,que son alas de esperanza...ellas nos mantienen,sin duda alguna...La ilusión esperanzada es la vela de la vida.
ReplyDeleteMi felicitación por tus hermosos y mágicos posts.
Mi abrazo inmenso y feliz fin de semana.
M.Jesús
Es que sin ilusiones que triste sería la vida.Bonita entrada.Besitos.
ReplyDeleteQue nuestras ilusiones no sean quimeras, sino el motor, las alas y la esperanza!
ReplyDeleteUn gran abrazo y buen fin de semana.
MariCarmen
Tienes mucha razón querida Ma. Carmen!
ReplyDeleteUn abrazo y feliz fin de semana.
No hay nada más bonito en la vida que las ilusiones que brotan del corazón. Preciosa entrada. Un fuerte abrazo desde el blog de la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea.
ReplyDeletehttp://tertuliacofradecruzarborea.blogspot.com/
Tienes razón Pepe, de un corazón puro brotan ilusiones puras amorosas y desinteresadas!
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